Apetencias
Para una vez que se publica una novela ambientada en Granada y escrita, además, por alguien -Justo Navarro- que conoce bien el oficio, y no por uno de esos innumerables plastas de mesa camilla que garabatea diálogos imposibles y es capaz de sacar los colores al lector más flemático...
Y para una vez que, además, la historia no se sitúa en la Alhambra durante la esplendorosa época nazarí, ni en el tortuoso Albaicín, ni en la Granada renacentista y cristiana de los Reyes Católicos, sino en la discreta y tranquila capital de provincias del año 1963, justo cuando la ciudad sufre una inundación tan tremenda que hace que Franco decida trasladarse, en visita oficial, a la zona afectada...
Y para una vez que la trama es detectivesca, con un comisario miope -el comisario Polo- y una muerte -la de un abogado en un conocido hotel de la ciudad- tras la que se esconde un entramado oscuro y críptico..., pues qué quieren que les diga: muy muy interesante.
Y para una vez que, además, la historia no se sitúa en la Alhambra durante la esplendorosa época nazarí, ni en el tortuoso Albaicín, ni en la Granada renacentista y cristiana de los Reyes Católicos, sino en la discreta y tranquila capital de provincias del año 1963, justo cuando la ciudad sufre una inundación tan tremenda que hace que Franco decida trasladarse, en visita oficial, a la zona afectada...
Y para una vez que la trama es detectivesca, con un comisario miope -el comisario Polo- y una muerte -la de un abogado en un conocido hotel de la ciudad- tras la que se esconde un entramado oscuro y críptico..., pues qué quieren que les diga: muy muy interesante.
agradabilisima sorpresa este libro de Justo Navarro, al cual no conocía. No tiene nada que envidiar a la novela negra clásica, figura a destacar el comisario Polo, un personaje gris, de una época gris, nada más y nada menos que 1963. En resumidas cuentas un magnifico libro.
ResponderEliminarun saludo
Veo que está usted muy al tanto de las novedades bibliográficas que no hay que dejar pasar... Buen tino.
EliminarOí al autor en la radio hace unos días y la verdad es que me llamó mucho la atención. Si además lo traes aquí y lo destacas, es porque indudablemener merece la pena. Un saludo.
ResponderEliminarSí, me lo parece. Navarro lleva muchos años en esto y es un muy buen traductor aparte de escritor.
EliminarPero que buena pinta todo lo que nos cuenta, señor Barbusse. A mí me ha convencido y eso que no soy nada de policíaca. Oiga, verá, me voy a permitir una impertinencia (perdóneme, se lo ruego), en esta línea temporal y flemática y estupenda de novela políciaca ¿ha leído usted "El caso de la mano perdida" de Fernando Roye (ed. Sinerrata)? De verdad que está a la altura de lo que hoy nos trae usted. Saludos.
ResponderEliminarNo lo conozco, señorita Mónica. ¡Desconozco tantas cosas!
EliminarLe echaré un ojo.
Gracias por la recomendación.
Qué de Isla Mínima... Para tirarse de cabeza, más si lo recomienda usted. Parece que todavía hay esperanza ;)
ResponderEliminarTampoco conozco Isla Mínima. Ví la película (que me parece magnífica) pero no sabía que estaba basada en novela.
EliminarNo, si yo hablaba de la película también. Que es muy True Detective, pero con hombres castizos en vez de patriotas de Luisiana.
EliminarAl margen de este post... Sr. Barbusse, algún comentario sobre los Karamazov? Ya sabe Vd. de mi interés en la literatura rusa.
ResponderEliminarImpaciente que es uno. Muchas gracias...
ResponderEliminarNo te preocupes, te comprendo. :-)
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