Las manzanas sin piel
Deslumbrante Adictiva Un monumento de la literatura La última gran
novela del siglo XX Terrorífica Obra de culto El brillante debut
novela del siglo XX Terrorífica Obra de culto El brillante debut
de un autor genial La evolución esperada y esperable de
la novela Su lectura es una experiencia no sólo mental
sino también física Una conmoción Obra maestra
Un libro-rompecabezas Lúcida Extraña
la novela Su lectura es una experiencia no sólo mental
sino también física Una conmoción Obra maestra
Un libro-rompecabezas Lúcida Extraña
Amena Desorienta
Hechiza
c
u
m
b
r
e
Emociona
Perdurará
Perdurará
Intrigante Mutante Proteica
Estimula la mayor inteligencia
Engancha hasta la extenuación
Reinventa la experiencia lectora
Extravagante como Tristram Shandy
Mucho más que una novela experimental
El Ulises del siglo XXI El Moby Dick del género del terror
Estimula la mayor inteligencia
Engancha hasta la extenuación
Reinventa la experiencia lectora
Extravagante como Tristram Shandy
Mucho más que una novela experimental
El Ulises del siglo XXI El Moby Dick del género del terror
A veces me apasionan más los comentarios y opiniones sobre un libro que el libro en sí. Pero no es este el caso, no se crean. Las etiquetas están bien para vender, pero luego se oxidan, como las manzanas sin piel, y solo queda la obra en sí misma, el talento. Y de esto -no sé por qué, no me lo pregunten-, creo, intuyo que hay bastante en las páginas de La casa de hojas. Prefiero comprobarlo en silencio, ajeno a esta catarata verborreica de calificativos y de ingeniosidades promocionales. Con atención y con intención, pero también con cautela y con moderación.
Yo he empezado a leerlo hace un par de días, pero te reconozco que aún estoy un poco desconcertada con la historia. Ya veremos como va.
ResponderEliminarUn saludo.
Vaya, pues sí que está bien aderezado el libro, la verdad es que no falta nada por decir de él. Yo soy también reacio a creerme todos los elogios y grandilocuencias así a priori, y más como las que se dicen ahí. Habrá que darle una oportunidad para opinar con criterio y por uno mismo.
ResponderEliminarUn saludo y enhorabuena por el blog.
¡Qué barbaridad! Pues cuando tropiezo con tal verborrea encumbrando una obra que no conozco, me vuelvo un poco recelosa. Creo que nos pasa a muchos lectores. Tendré que decidir por mí misma. Saludos!!
ResponderEliminarYo lo pude ojear ayer en una librería y me entró pánico al ver las composiciones de página, los textos intercalados, incrustados, degradados, páginas en blanco o casi, etc.etc. La verdad es que el maquetador tiene el cielo ganado. Parece, no obstante, atractivo.
ResponderEliminarYo también soy cauta ante la palabrería publicitaria. Si usted está leyendo "La casa de hojas", o piensa hacerlo, esperaré a que comparta su experiencia. Acabo de recibir Los hermanos Karamázov y voy a estar muy ocupada...
ResponderEliminarUn saludo,
Gemma G.
Sí, a mi también me da miedín las opiniones unánimes a favor (o en contra) de algo. El libro lo tengo, lo he colocado en la estantería y le he dicho: "y ahora te esperas". Ya veremos.
ResponderEliminarSaludos!
Hola!! Yo me guío por la opinión de los que lo estáis leyendo. Un saludo!
ResponderEliminarSe le puede achacar cierta superficialidad o excesivo énfasis en la forma, pero a mí me pareció muy bueno.
ResponderEliminarHola!! Acabo de ir a encargarlo a la librería que tengo cerca de casa...Cada vez que encargo algo es como si les pidiera un perro verde...Y así ha sido...En fin...Un saludo!!
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