Lectura ilustrada Don Quijote, II, caps. 28-30

Ilustración de J. Alaminos para la ed. de Madrid, 1887

Actividades

A) Mira la ilustración que aparece arriba y contesta: 1. ¿Dónde tiene lugar esta aventura? 2. ¿Para qué cree don Quijote que está allí ese barco? 3. ¿A cuenta de qué se pone a llorar amargamente Sancho y qué le dice, mohíno y colérico, don Quijote? 4. ¿Sabe algo Sancho del cómputo de Ptolomeo, el mayor cosmógrafo conocido? 5. ¿Qué prueba le dice don Quijote a Sancho que haga para ver si han pasado ya la línea equinoccial? 6. ¿Qué se encontraron en el río que a don Quijote le pareció castillo o fortaleza? 7. ¿Qué particularidad de la gente que salía del "castillo" hace que don Quijote exclame: "Mira qué de malandrines y follones me salen al encuentro, mira cuántos vestiglos se me oponen, mira cuántas feas cataduras nos hacen cocos..; pues ¡ahora lo veréis, bellacos!" 8. ¿Qué palabras de don Quijote en esta aventura denotan un derrumbamiento vital y espiritual de nuestro protagonista?

B) Observa estas ilustraciones (solo para participantes inscritos) relativas a los tres capítulos leídos y elige para cada una de ellas un pie descriptivo adecuado de entre los que se ofrecen a continuación:

1. Y al salir del alba siguieron su camino buscando las riberas del famoso Ebro. 2. Y si no fuera por los molineros, que se arrojaron al agua, y los sacaron como en peso a entrambos, allí habría sido Troya para los dos. 3. Apeóse Don Quijote para catarle las heridas. 4. Díjole a su señor: “El rucio rebuzna, condolido de nuestra ausencia, y Rocinante procura ponerse en libertad para arrojarse tras nosotros”. 5. Y diciendo esto, echó mano a su espada y comenzó a esgrimirla en el aire contra los molineros. 6. Pero ninguna cosa le dio más pena que el oír roznar al rucio y ver que Rocinante pugnaba por desatarse. 7. Y puesto en pie en el barco, con grandes voces comenzó a amenazar a los molineros, diciéndoles: “Canalla, malvada y peor aconsejada…” 8. Pero no de manera que dejasen de trastornar el barco y dar Don Quijote y con Sancho en el agua. 9. Mira qué de malandrines y follones me salen al encuentro, mira cuántos vestiglos se me oponen, mira cuántas feas cataduras nos hacen cocos. 10. Yendo, pues de esta manera, se les ofreció a la vista un pequeño barco sin remos, ni otras jarcias algunas… 11. Púsose Sancho de rodillas, pidiendo devotamente al cielo le librase de tan manifiesto peligro. 12. Corre, hijo Sancho, y di a aquella señora del palafrén y del azor que yo, el Caballero de los Leones, besa las manos a su gran fermosura. 13. Mandó la duquesa a Sancho que fuese junto a ella, porque gustaba infinito de oír sus discreciones. 14. Hermosa señora, aquel caballero que allí se parece, llamado el Caballero de los Leones, es mi amo, y yo soy un escudero suyo, a quien llaman en su casa Sancho Panza. 15. Descargó de golpe el cuerpo, y llevóse tras sí la silla de Rocinante, que debía estar mal cinchada, y la silla y él vinieron al suelo. 16. Y llegándose cerca, conoció que eran cazadores de altanería.

Contesta: 1. ¿A cuenta de qué le dice don Quijote a Sancho estas duras palabras?: "Asno eres, y asno has de ser, y en asno has de parar cuando se te acabe el curso de la vida, que para mí tengo que antes llegará ella a su último término que tú caigas y des en la cuenta de que eres bestia" 2. ¿Cómo es posible que la duquesa conociera a don Quijote y Sancho antes del encuentro que vemos en la imagen nº 16? 3. Completa estas palabras que don Quijote le dice a Sancho momentos después de lo que vemos en la imagen nº 1: "No huye el que se retira, porque has de saber, Sancho, que la valentía..."

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Apunte gráfico (solo para curiosos) ver